Durante esta actividad aprendemos a descubrir el mundo a través de los sonidos, especificamente los sonidos del hogar. Escuchar y discriminar es una habilidad indispensable en el desarrollo del lenguaje. Los niños escuchan y reconocen los sonidos más comunes de la casa e identifican la lámina correspondiente. Por supuesto los niños que usan PECS también pueden reconocer que escuchan y formar la frase "Escucho la puerta" por ejemplo.
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